Riesgos de inducir el parto: cosas que debe saber antes de que lo induzcan
La naturaleza y los requisitos de su cuerpo controlan principalmente el momento del dolor del parto, pero a veces su médico toma una llamada para inducir el parto según las condiciones de salud de usted y su bebé. La estimulación de las contracciones uterinas para prepararse para el parto del bebé durante el embarazo, incluso antes de que comience el parto de forma natural, el parto vaginal se conoce como inducción del parto. Las razones para inducir el parto durante su embarazo pueden ser muchas: usted está dos semanas después de su fecha de parto y aún así su parto no ha comenzado de manera natural, o su parto no ha comenzado incluso después de su interrupción del agua. Hay otras razones, como si el crecimiento de su bebé no es según el ritmo requerido, o si ha contraído una infección en el útero. Pero el proceso de inducir el trabajo artificialmente tiene algunos riesgos asociados con él. Este artículo le ofrece una visión detallada de los efectos secundarios de inducir el parto de forma artificial.
¿Qué son los riesgos de inducción del parto?
La inducción del parto depende de la condición de salud del bebé y de la madre. Puede considerar la posibilidad de inducir el parto si tiene solo unos pocos días de vencimiento, o si el bebé llega una semana tarde a la fecha de vencimiento. En estos casos, no hay complicaciones ni riesgos para el bebé o para usted mismo. Sin embargo, si el bebé está angustiado o si se enfrenta a ciertas condiciones de salud, su médico puede considerar inducir el parto de forma artificial. Sin embargo, viene con algunos riesgos. Veamos algunos de los riesgos que un trabajo de parto inducido artificialmente puede traer consigo.
1. Causa una frecuencia cardíaca elevada en el lactante.
El proceso natural prepara al bebé para sobrevivir fuera del útero automáticamente. Inducir trabajo de parto significa que en realidad estás tratando artificialmente de que nazcan al bebé incluso antes de que esté listo para dar a luz. Esto ejerce mucha presión sobre el bebé y puede causarle sufrimiento fetal. Además, en una inducción inducida artificialmente, las contracciones tienden a ser mucho más dolorosas y más largas que las que ocurren naturalmente. Esto podría llevar a su bebé a permanecer en una posición que puede hacer que su trabajo de parto sea más prolongado y más doloroso.
2. Mayor riesgo de que el bebé sea admitido en la UCIN
Un bebé nacido de un parto inducido artificialmente no está desarrollado físicamente para sobrevivir por sí solo. Es más probable que tengan problemas para comer, respirar o incluso para mantener una temperatura corporal estable y normal. En tales casos, necesitarían apoyo adicional y deberían mantenerse en la UCIN. Esto restringe sus contactos con sus padres u otros cuidadores, lo que es muy necesario para un recién nacido. También retrasa y se vuelve más difícil comenzar a amamantar.
3. Posibilidades de cesárea
El saco amniótico protege al bebé de las infecciones. Una vez que se rompe el saco amniótico o el agua, el parto debe realizarse de inmediato. Si el bebé no está en una posición favorable para ser entregado por vía vaginal, o si el médico detecta sufrimiento fetal en el bebé, deberá realizar una cesárea para que el bebé sea entregado. Esto aumentará su duración de la estancia en el hospital. Una cesárea también tiene un período de recuperación más largo que un parto vaginal normal.
4. Mayores posibilidades de conseguir ictericia
La ictericia en los bebés recién nacidos es común. La ictericia es la incapacidad del hígado para descomponer los glóbulos rojos. Los bebés que nacen antes de estar listos para el parto generalmente tienden a tener un hígado inmaduro. Esto aumenta sus posibilidades de contraer ictericia. La ictericia es absolutamente tratable y está completamente curada, pero esto también significa que el bebé debe permanecer en el hospital durante un período más prolongado para el tratamiento.
5. Mayor necesidad de medicamentos para el dolor
Inducir el parto de manera artificial puede hacer que las contracciones se vuelvan más fuertes y más dolorosas de lo que serían naturalmente. Es posible que deba tomar epidurales para controlar y reducir su dolor.
6. Baja frecuencia cardíaca
Los medicamentos primarios que se usan para inducir el parto, la prostaglandina u oxitocina, pueden causar contracciones excesivas que pueden reducir la disponibilidad de oxígeno para su bebé, lo que lleva a una frecuencia cardíaca más baja.
La decisión de inducir el parto o no inducir el parto artificialmente depende del riesgo de desarrollar complicaciones durante el parto. Se basa enteramente en los requisitos de salud individuales. El riesgo se evalúa en función de cuánto tiempo tiene que retrasar su embarazo, su edad y el tamaño del bebé. Una inducción artificial del parto solo debe considerarse cuando existe un mayor riesgo de que el bebé permanezca en el útero que afuera. Vaya a los controles regulares y siempre consulte a su médico para saber qué es lo mejor para usted y para su bebé. ¡Que tengas un feliz embarazo!